¿Qué es el emprendimiento social y cómo impacta en tu Propósito de Vida?

¿Cuáles podrían ser algunos de los ingredientes esenciales para ser un emprendedor exitoso? Sin duda, podemos hacer una lista amplia, pero si como éxito entendemos la realización integral del joven emprendedor, podemos mencionar el sentido que pueda encontrar al realizar su actividad en todos los aspectos de su vida, el económico, el profesional, el social y el personal.

Propósito de Vida y emprendimiento social en la misma fórmula

"Recuerda esto. Aférrate a esto. Esta es la única perfección que existe: la perfección de ayudar a los demás. Esta es la única cosa que podemos hacer que tiene un significado duradero. Es por eso que estamos aquí". - Andre Agassi

Partiendo que no somos un conjunto de seres separados que responde a realidades, contextos y aspiraciones diferentes para cada ámbito de nuestras vidas, sino que es la conjunción de todas las esferas de nuestra vida, la que nos dará esa sensación de realización y bienestar por saber que lo que hacemos tiene un sentido trascendente que va más allá de los fines utilitarios.

Para algunos, o quizá para muchos, el deseo de una persona de administrar un negocio sería el factor más importante para definir su éxito. Pero si escarbamos un poco, seguro que tendrá un porqué para distintos ámbitos de su vida, ¿qué pasaría si lográramos encontrar un propósito que aplique en todos?

Suena tan simple, pero si alguien tiene un fuerte "porque" detrás de lo que hace, habrá encontrado que hay una fuerza vital casi imparable que lo impulsará como un gran motor en la etapa temprana de su emprendimiento, donde el trabajo, esfuerzo, paciencia y perseverancia resultan indispensables para el arranque.

Cuando se inicia un negocio, hay contratiempos inevitables que debemos sortear con la claridad y motivación que nos brinda el tener un sentido de propósito. Pero no siempre se hace consciente, ni se tiene el cuidado de asegurarse de conectarlo con las funciones de la empresa.

Sin embargo, cuando sí se conecta, aumenta el deseo de trabajar en él y se transmitirá con mayor facilidad para así llegar a más gente que se sume como cliente, colaborador o proveedor, hasta convertirse en un creyente defensor de tu marca o negocio.

Pero ¿de dónde viene el porqué? Por lo general, proviene de alguna situación de nuestro entorno que quisiéramos cambiar y creemos que podemos encontrar una solución original para resolverla (idea, producto o servicio). Partiendo del supuesto básico que nuestro negocio se enfocará en atender una necesidad o un problema social, la gente estaría dispuesta a pagarnos por obtenerla.

Visto así, llevaría ya implícito el cumplimiento de una responsabilidad social. Si eso que queremos resolver, además es algo que nos mueve en lo personal, ¡qué mejor! Imagina que destines la mayor parte de tu tiempo a impulsar tu negocio y al mismo tiempo contribuyendo a tu Propósito de Vida, todo en uno.

Sin embargo, la mayoría de los emprendedores están llenando agujeros más profundos que los económicos. Un ejemplo es el emprendimiento social, que no solo abarca las actividades emprendedoras tradicionales, sino que están además ligadas a actividades o negocios que resultan en utilidades tanto sociales como financieras; el modelo incluye tanto el beneficio social como los principios de negocios sostenibles.

Me pregunto, ¿cuál es la mayor fuerza motivacional, tratar de compensar lo que no tienes o tratar de completar algún propósito superior? Algo que conecte con la necesidad de crear algo más grande que nosotros mismos.

Lo más importante que se debe transmitir es que no se debe iniciar un negocio sin un propósito muy fuerte, porque un negocio requiere determinación y nervios y un gran propósito (en términos de significado, no de tamaño) te ayudará a pasar las largas noches y recordar que estás generando algo más grande que tú mismo, que es reconocido y valorado por los demás.

Una vez que descubres tu propósito, todo lo que hagas estará orientado a este. Si cada acción es precedida por un pensamiento, si tu pensamiento es a propósito, tus acciones seguirán naturalmente buscando ese destino. Imagina llegar a la etapa en la que sabes que cada pensamiento que tienes y cada acción que realizas es a propósito, acercándote deliberadamente a cumplir con tu razón de ser.

¿Cómo sabes qué es eso? Puedes hacerte estas dos preguntas. Número uno, ¿qué haría yo gratis?, y número dos, ¿qué estoy haciendo para animar a los que me rodean? La primera pregunta debe orientarse hacia lo que te apasiona, y la segunda te empuja a convertir esa pasión en un propósito.

Los emprendedores hacen esto y encuentran una forma de sostener y financiar la búsqueda de sus ideas, convirtiéndola en un negocio que sea rentable y les proporcione los medios para cumplir su propósito en la vida. Lo tienes dentro de ti, y lo encontrarás si estás dispuesto a buscarlo.

Tu Propósito de Vida te sostendrá a largo plazo, ¡así que ve a por él!

El Propósito de Vida es el atributo más importante que puede tener un emprendedor. Tan simple como suena, pero tener un fuerte "por qué" detrás de su negocio es un ingrediente esencial para convertirse en un emprendedor exitoso tanto en los negocios como en la vida.

En Universidad Tecmilenio sabemos la importancia del emprendimiento social, y por ello contamos con la Especialidad en Innovación que te puede ayudar en el desarrollo de tu emprendimiento, facilitando la identificación de necesidades de tus clientes y consumidores con soluciones disruptivas que conecten a tu negocio con aquello que es relevante para ellos y para tu negocio obteniendo ventajas estratégicas. Te invitamos a consultar más información con nuestros asesores.