Una pareja siempre tendrá “buenas y malas”, pero para que su amor perdure y viva feliz a lo largo del tiempo, es necesario que las interacciones “buenas” ganen y por “goliza”.  La diferencia debe ser por lo menos de cinco a uno (5-1), según el doctor John Gottman, que no es entrenador de fútbol, sino estudioso de las relaciones humanas, principalmente de parejas.

Es decir, que por cada interacción negativa, como una respuesta grosera o fría, se deben tener cinco positivas, hablamos de interacciones cariñosas, dulces, atentas, de apoyo.

Gottman es reconocido por realizar estudios de pareja por más de tres décadas, en lo que se le ha llamado su “Laboratorio del amor”, un departamento equipado con cámaras (salvo recámara y baño) para analizar la manera en que cotidianamente interactúan las personas que sostienen una relación amorosa.

De esa observación concluyó que las parejas felices tienen más de cinco interacciones positivas por cada negativa. Se trata de una proporción que habla del cuidado y trabajo que requiere una buena relación.

Los cuatro jinetes, interacciones positivas en tu relación amorosa

Una pareja puede llevarse bien y no tener discusiones, pero sí, sus interacciones buenas no superan de 5-1 a las incómodas, los estudios de Gottman arrojan que no perdurarán y serán infelices, aunque no enfrenten conflictos.

Hablamos de esas críticas, reacciones defensivas, desprecios o muros de frialdad que tanto nos afectan. De hecho, Gottman llama a estos cuatro elementos o señales “Los 4 Jinetes del apocalipsis de las parejas”.

Son actitudes con las que solemos responder, muchas veces de manera inadecuada, cuando no sabemos manejar nuestras emociones e inseguridades.

Lo anterior no quiere decir que no van a ocurrir críticas (que a veces son sanas) o reacciones defensivas (en ocasiones, naturales) en una relación de pareja; es normal que sucedan. Lo que no es viable para el futuro de esa relación, es que ese intercambio de mensajes negativos sea mayor a la relación 5-1 que hemos dicho.

Por cada acción de desprecio o de frialdad, debe haber al menos cinco demostraciones de afecto, interés, respaldo o sentido del humor.

Así que es momento de decir “te quiero, te quiero, te quiero”, pero de manera sincera y significativa, y hacer un gran esfuerzo por reducir nuestras malas reacciones.

No hay que olvidar que las buenas relaciones humanas nos hacen más felices y saludables, según una gran variedad de estudios científicos, como los de Christopher Paterson de 2006.

Para ello, ayuda mucho tener ambientes positivos en casa y en la escuela, precisamente para lo cual el próximo 24 de febrero tendremos nuestro Wellbeing360 a partir de las 9:00 horas, en la que expertos en bienestar compartirán sus conocimientos y experiencias.

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Recuerda que siempre habrá buenas y malas, pero hay que trabajar para que prevalezcan las buenas, por el bienestar del amor.